Agencia MANL
México, D.F.- Es indispensable prohibir la
venta de refrescos azucarados en presentaciones y/o porciones mayores a
500 mililitros en establecimientos de comida y en espacios de
congregación pública, regular la venta de bebidas azucaradas, proteger
la salud de la población capitalina y promover el consumo de agua.
Así
lo refirió esta mañana el diputado local y presidente del partido Nueva
Alianza en la capital, Jorge Gaviño Ambriz, quien ofreció una
conferencia de prensa en la que dio a conocer que mañana jueves
presentará ante el Pleno de la VI Legislatura, una “Iniciativa con
Proyecto de Decreto por el que se modifican diversas disposiciones de la
Ley de Establecimientos Mercantiles del Distrito Federal y de la Ley
para la Celebración de Espectáculos Públicos” en la misma entidad.
Jorge
Gaviño, manifestó que uno de los problemas principales de salud pública
en el Distrito Federal es el consumo desmedido de bebidas azucaradas
como los refrescos; y ante los altos índices de diabetes y obesidad que
presenta la capital del país es necesario que el gobierno tome las
medidas necesarias ante esa problemática lacerante.
Dio a
conocer que México ocupa el primer lugar en ingesta de refrescos a nivel
mundial, ya que bebemos un promedio de 163 litros per cápita cada año,
lo que representa un 40% de consumo mayor al estadounidense, cuyo
promedio se encuentra en los 118 litros.
Dijo que ocupamos el
primer lugar de obesidad femenina, el segundo lugar de obesidad
masculina y de los primeros lugares en obesidad infantil a nivel
mundial.
Razón por la cual, llamó a los capitalinos a hacer
conciencia y a modificar nuestros hábitos. “No se trata de combatir el
derecho al consumo, sino reducir la ración en la venta” para impulsar
una nueva cultura, fomentando la ingesta de agua simple. Dijo que es
urgente implantar una política pública en la ciudad, para que en todas
las escuelas existan bebederos con agua potable filtrada.
Jorge
Gaviño enfatizó en que es indispensable que los restaurantes estén
obligados a proporcionar vasos con agua a los clientes que lo soliciten,
en lugar de venderles una botella de agua cuyo precio es superior que
el del mismo refresco.
Todos los especialistas convocados a
esta conferencia de prensa, coincidieron en que en los productos,
paquetes y lugares de congregación pública, se dé a conocer, en los
productos y paquetes, la información de la cantidad de calorías que
contienen estas bebidas, que se prohíba el uso los refrescos como
regalo, o artículos de promoción y que se desarrollen campañas de
alimentación contra el consumo del refresco.
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