CRONISTA
Ciudad de Méx.- Radio Educación, medio público por excelencia está celebrando en estas fechas 95 años de servicios de incursionar en la labor educativa y cultural. De dar servicio a la comunidad con la creación de contenidos que informan, orientan, apoyan y enriquecen el entorno de sus escuchas para contribuir a la formación de un tejido social que se vea permeado por la cultura, la inclusión, la historia, el debate y la información objetiva y certera.
Pilar de esta emisora son sus trabajadores y trabajadoras que a lo largo de los años han contribuido con profesionalismo, dedicación y entrega a su labor de comunicación, a pesar de las restricciones presupuestales que año con año se ven reducidas y de los bajos salarios que sólo demuestran el nulo reconocimiento a una labor titánica de sostener en condiciones óptimas la emisora y sus necesidades, tanto técnicas como humanas.
Hoy por hoy nos enfrentamos a una más, los pagos y prestaciones que por ley nos corresponden en este fin de año de 2019, no llegan, a pesar de que están programados en el calendario y de que en otras instituciones de la propia Secretaría de Cultura ya se ha hecho.
Mas allá de que el asunto del dinero es de suma urgencia para quienes laboramos en esta emisora, esto demuestra el poco interés que se ha puesto en las obligaciones mínimas con los trabajadores y trabajadoras de esta emisora.
Hoy haremos, por instrucciones de la Unidad Interna de Protección Civil un simulacro de sismo. Parece que también simulacro de pagos.
El respeto a los derechos laborales de los trabajadores es prioridad en cualquier institución, señores.
Estamos celebrando 95 años de Radio Educación con bombo y platillo, pero en la cuerda floja.
Sindicato Nacional Democrático de Trabajadores de la Secretaría de Cultura.
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